Sra. Ana Mato Adrover
Congreso, Madrid
España
Señora diputada,
Desde aquel affaire del Jaguar que todavía no sabemos quien pagó, no habíamos tenido noticias suyas. Ahora se nos descuelga usted con unas declaraciones producto, muy posiblemente, del típico calentón veraniego tan propio de estas fechas. Así, la prensa le atribuye, entre otras, esta frase: “quienes crean catalanofobia son los que hablan de ella”, complementada con otras típicas lindezas sobre Catalunya y los catalanes a las que ya estamos más que acostumbrados.
Negar la evidencia y culpar a la víctima, las conocidas estrategias de siempre y ahora apadrinadas por el Partido Popular. Y así les va a ustedes en Catalunya. Diez por ciento del voto es todo lo que son capaces de recoger tras haber cambiado de líderes regionales más veces que ningún otro partido en los últimos treinta años. Los frutos: catorce diputados en un Parlament de 135. Parece que se conforman ustedes con muy poca cosa.
Negar la evidencia, aquí, ya no cuela, y más cuando son ustedes (con la siempre inestimable ayuda del PSOE) los principales responsables de la catalanofobia que se ha ido extendiendo por España como una imparable mancha de aceite. Especialmente durante los últimos nueve años, es decir a partir de aquella mayoría absoluta del año 2000 que el Partido Popular no supo digerir y que en cuatro años les llevó a ustedes desde una posición de privilegio político a la oposición, pasando por la boda de El Escorial y otras extravagancias por el estilo.
¿O es que ya no recuerda usted aquellas campañas anticatalanas de su partido con la excusa del Estatut? Si preciso, el señor Arenas le puede ayudar a recordarlo. Se trata de campañas con muy mala idea pero que han ido calando hondo entre un amplio sector de la población española. Ustedes han ido creando un caldo de cultivo anticatalán que les da muchos votos en España a costa de perder algunos en Catalunya. Ustedes buscan ganar tres votos en Zamora o Teruel aun sabiendo que perderán uno en Girona. La suya es una estrategia política que tal vez les puede llevar a ganar el gobierno de España, sí, pero a costa de seguir siendo una fuerza marginal y mal vista por el noventa por ciento de los catalanes.
Y ya para terminar, lo más sofisticado: culpar a la víctima. Ustedes no solo han creado y expandido un generalizado ambiente anticatalán sino que encima se permiten la osadía de criticar que el agraviado lo denuncie públicamente. Siguiendo con sus extravagantes teorías, ahora resulta que los culpables de la catalanofobia somos los propios catalanes. Usted que parece una persona inteligente, ¿realmente se cree lo que dice?
Cordialmente,
Miquel Saumell
Sarrià, Barcelona
Catalunya
Congreso, Madrid
España
Señora diputada,
Desde aquel affaire del Jaguar que todavía no sabemos quien pagó, no habíamos tenido noticias suyas. Ahora se nos descuelga usted con unas declaraciones producto, muy posiblemente, del típico calentón veraniego tan propio de estas fechas. Así, la prensa le atribuye, entre otras, esta frase: “quienes crean catalanofobia son los que hablan de ella”, complementada con otras típicas lindezas sobre Catalunya y los catalanes a las que ya estamos más que acostumbrados.
Negar la evidencia y culpar a la víctima, las conocidas estrategias de siempre y ahora apadrinadas por el Partido Popular. Y así les va a ustedes en Catalunya. Diez por ciento del voto es todo lo que son capaces de recoger tras haber cambiado de líderes regionales más veces que ningún otro partido en los últimos treinta años. Los frutos: catorce diputados en un Parlament de 135. Parece que se conforman ustedes con muy poca cosa.
Negar la evidencia, aquí, ya no cuela, y más cuando son ustedes (con la siempre inestimable ayuda del PSOE) los principales responsables de la catalanofobia que se ha ido extendiendo por España como una imparable mancha de aceite. Especialmente durante los últimos nueve años, es decir a partir de aquella mayoría absoluta del año 2000 que el Partido Popular no supo digerir y que en cuatro años les llevó a ustedes desde una posición de privilegio político a la oposición, pasando por la boda de El Escorial y otras extravagancias por el estilo.
¿O es que ya no recuerda usted aquellas campañas anticatalanas de su partido con la excusa del Estatut? Si preciso, el señor Arenas le puede ayudar a recordarlo. Se trata de campañas con muy mala idea pero que han ido calando hondo entre un amplio sector de la población española. Ustedes han ido creando un caldo de cultivo anticatalán que les da muchos votos en España a costa de perder algunos en Catalunya. Ustedes buscan ganar tres votos en Zamora o Teruel aun sabiendo que perderán uno en Girona. La suya es una estrategia política que tal vez les puede llevar a ganar el gobierno de España, sí, pero a costa de seguir siendo una fuerza marginal y mal vista por el noventa por ciento de los catalanes.
Y ya para terminar, lo más sofisticado: culpar a la víctima. Ustedes no solo han creado y expandido un generalizado ambiente anticatalán sino que encima se permiten la osadía de criticar que el agraviado lo denuncie públicamente. Siguiendo con sus extravagantes teorías, ahora resulta que los culpables de la catalanofobia somos los propios catalanes. Usted que parece una persona inteligente, ¿realmente se cree lo que dice?
Cordialmente,
Miquel Saumell
Sarrià, Barcelona
Catalunya
10 comentaris:
perquè l'accent de "sarrià" en castellà i "Catalunya" en català? :O
Ben vist, greips. Un error, la relaxació de les vacances potser. Ja està corregit. Gràcies.
M'encanta l'embolcall d'estricta educació que li dones a aquesta posada en qüestió de la Sra. Mato; no es pot dir més amb menys...una abraçada
M’encanta que t’encanti, Trina, i espero no decebre’t tampoc en properes cartes. Et puc anticipar que n’estic preparant una per a la senyora Teresa Cunillera, vicepresidenta del Congreso de los Diputados, que de vegades també parla més del compte o, si més no, no compta fins a 33 abans d’obrir la boca. Diu que milita al PSC però jo m’ensumo que només ho fa al PSOE.
Felicitats pel teu escrit, Miquel, és una vergonya el que fan certs polítics per esgarrapar quatre vots de l'Espanya més rància. Com si el segle XX no ens hagués ensenyat prou què passa quan es criminaltiza un col·lectiu. Ho trobo senzillament repulsiu i seria d'agrair que alguna veu peninsular també s'aixequés per protestar contra tanta infàmia.
Per cert, vaig llegint als diaris que us deixen el barri la mar de bonic...quina sort els sarrianencs!
Clara,
L'Espanya més rància que dius és l'Espanya real que tenim a l'oest, només n’hi ha una. Han millorat molt les carreteres i les infrastructures en general, però les infrastructures mentals segueixen sent les mateixes de sempre. Amb totes les excepcions que hi vulguem posar, que n'hi han i no són pas poques, però segur que encara resulten del tot insuficients.
I això que dius que has llegit de Sarrià potser és propaganda del senyor Hereu. Precisament el nostre barri té dues característiques que el distingeixen dels altres barris barcelonins: és on hi ha menys inversió pública municipal (només el 0.4% del total de Barcelona corresponent al pla “E” o pla Zapatero, un veritable escàndol!) i on menys es vota als partits que formen el tripartit (entre tots tres no arriben ni al 25%). No sé quina cosa és conseqüència de quina altra. Segurament és el peix que es mossega la cua.
Vaig llegir un extens reportatge a tot color al Periódico de Catalunya:
http://www.elperiodico.cat/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAT&idnoticia_PK=633235&idseccio_PK=1453
Si tens problemes amb l'enllaç, pots escriure a Google "Sarrià preserva els seus nuclis històrics"
Fins la propera!
Clara,
Gràcies pel link. Ahir ja mig intuïa que potser es tractava de propaganda, i ara m'aclareixes que es tracta d'una informació del Butlletí Oficial de Nicaragua (així és com es coneix El Periódico en determinats ambients). M'ho he llegit, el discurs sona bé, si no fos... si no fos que la gran majoria del nucli històric ja se l'han carregat els mateixos que ara diuen que volen conservar les poques restes que encara queden. En podríem dir cinisme polític i segurament l’encertaríem.
Publica un comentari a l'entrada